Empoderadoras Nº1: Rocío
La malagueña Rocio Fuentes Cortina (32 años) en la Fundación es facilitadora (formación y terapeuta grupal) de Lidera tu vida, un espacio dedicado al empoderamiento de las mujeres a partir de los 50 años de vida, de historia y de experiencia.
Para el mes de la mujer le hicimos tres preguntas:
1. Destaca tres cosas que hiciste en tu vida que te llenan de orgullo:
Superar un trastorno alimenticio después de 13 años conviviendo con el mismo.
Dedicarme profesionalmente a lo que apasiona: psicología, coaching y corporalidad.
Vivir de forma más consciente, responsable y orgánica.
2. ¿Qué piensas que es importante para lograr el empoderamiento de las niñas/mujeres?
Pienso y siento que no es sólo una cuestión de las mujeres. Es una dirección que hemos de asumir todxs como responsables de la sociedad que hemos creado. Para lograr el empoderamiento de las niñas y las mujeres considero necesario un aprendizaje profundo que nos lleve a:
Cuestionar, revisar, analizar y desaprender condicionamientos sociales que no son útiles ni funcionales porque nos deshumanizan progresivamente.
Responsabilizarnos de nosotrx mismos y conectar con nuestro potencial, nuestro poder personal. Cuando una persona toma decisiones, crea circunstancias. Cuando permitimos a otra persona o a las circunstancias que decidan por nosotrxs mismxs, estamos entregándole el poder a otrxs. Es más probable que otras personas o las circunstancias decidan por unx mismx, si una persona no está conectada con su poder y potencial. Nuestra capacidad reflexiva, contemplativa, decisiva y la voluntad nos pertenecen y, por tanto, hemos de asumir una responsabilidad proactiva.
Construir relaciones saludables primero con nosotrxs mismos (saludables, amables, armónicas, justas), para poder construir relaciones con los demás de equidad. Vinculaciones basadas en el respeto, la aceptación y la cooperación, reconociendo la diversidad como valor intrínseco y generar condiciones psicológicas, sociales y jurídicas justas y equitativas para un bienestar y bienser en sociedad.
Siendo todxs partícipes de la sociedad en la vivimos, considero importante desprogramar patrones conscientes e inconscientes mentales, emocionales y físicos que limitan nuestra realidad y programar (reescribir programas) para ser cocreadores conscientes de nuestra vida, personal y colectiva, que nos acerque a nuestra naturaleza y a una sociedad más humanizada. Observarnos conscientemente personal y colectivamente y madurar como sociedad. Madurar es transformar, y para ello es necesario sanar y autoconocernos internamente para tomar conciencia de nosotrxs mismxs y generar confianza, visión e impulso conjunto, de unidad y totalidad. Desarrollar autoconocimiento del potencial humano, tanto de hombres como de mujeres y que juntos vayamos hacia un camino más consciente, humanizado y coherente con lo que realmente somos.
3. ¿Cuál ha sido la persona que más te ha motivado, que más admiras?
Difícil elección.
La admiración tiene que ver con una contemplación amorosa de aquello que nos despierta interés y placer. Todo lo que existe es digno de admiración y depende del observador que lo contempla.
Admiro la sabiduría de la naturaleza; a toda persona que aporta al mundo su gota de agua para hacer de éste un lugar más humano, un océano nutritivo para tod@s; a los que se atreven a ver más allá de lo común, lo evidente, lo mundano.
Admiro la funcionalidad de la mayéutica de Sócrates, algunos planteamientos de Carl Jung, de Carl Rogers, Lev Vygotsky, Laura Posner , Fritz Perls, Anna y Sigmund Freud, Mary Ainsworth, Melanie Klein,
Virginia Satir, Jiddu Krishnamurti, Ekhart Tolle, Anthony de Mello, la oratoria y el recorrido de Mario Alonso Puig...
También admiro a mi equipo primario, mi familia y la belleza del corazón de una gran amiga.
Admiro a todas las personas que entran en mi vida por ser espejos en los que me veo reflejada.